viernes, julio 14, 2006

La Venganza del Futbol


Jorge Luis Borges definió el fútbol así: "Es un invento post-colonial que sustituye las peleas a cuchillo".

El 20 aniversario de la muerte de Borges fue eclipsado por el mundial de fútbol de Alemania. Pocos en Argentina lo recordaron. Borges murió en Ginebra el 14 de junio de 1986, unos días después Argentina ganaría a Inglaterra en la copa mundial celebrada en México. La alegría fue infinita. El fútbol se tomó su venganza.

En 1969 Borges fue entrevistado luego de que la universidad de Oxford anunció su decisión de conferirle el título de Doctor Honoris Causa; la misma universidad dio a Diego (También conocido como "D10s") el título honorífico de Maestro Inspirador de Quienes Todavía Sueñan. El fútbol nunca perdona. Aqui vá la transcripción de una parte de esa entrevista:

Usted se ha llamado, profesor, con modestia, "un poeta de pocos temas". Me pregunto cuáles son, a su juicio, los temas principales de su poesía.

Creo que podemos reducirlos a uno solo, que para mí es el problema esencial de la filosofía, de la metafísica: creo que si pudiéramos resolver ese problema -pero, desde luego, no hay razón alguna para que seamos capaces de esa hazaña, no hay razón alguna para que el misterio del universo sea comprensible- ese tema es el tiempo.

El tiempo sobre todo relacionado al problema de la identidad personal, con lo cual volvemos a la antigua perplejidad del griego sobre el río, aquella famosa sentencia de Heráclito: "Nadie baja dos veces al mismo río".

Al principio pensamos que Heráclito habla del río, "nadie baja dos veces al mismo río porque las aguas cambian", y luego, con un principio de terror, sentimos que nadie baja dos veces al mismo río porque nosotros también somos el río, es decir, hay algo perdurable en nosotros y también hay algo cambiante.

Y ése es, me parece, el misterio del tiempo y creo que todo lo que yo he escrito se refiere, de algún modo, a esas dos perplejidades que son quizás la misma, la del tiempo y la de la identidad personal, la de la realidad del yo.